Haciendo memoria recuerdo lo estresante/emocionante y extraño fue ese día... éramos jóvenes y ninguno tenia experiencia anterior(mirando para a tras ahora uno se da cuenta de que éramos bien pollos).
En mi casa estábamos Jaime, Elizabeth y Yo flojeando y conversando de nada particular...cuando Elizabeth comenzó con un extraño dolor de estomago, las horas pasaban y el dolor persistía... le achacamos el dolor a mil cosas desde a lo que había comido (a mi cuñada le dio por comer plátano en cantidades astronómicas durante su embarazo) o a lo mucho que había caminado el día anterior, recién a ultima hora asociamos el dolor con el nacimiento de mi sobrina.
Al darnos cuenta de lo que se venia, mi hermano partió a buscar el bolso con las cosas típicas que debía llevar al hospital mientras yo me quedaba con ella y buscaba dinero para partir al hospital(¡OH! ni un padre presente para ayudar a esta tropa de pasteles en el tema).
Gracias a Dios encontré dinero(por suerte el hospital queda bastante cerca, sino no alcanzaba xD) y partimos al Félix Bulnes.
Y cerca de las 22:30 llego a este mundo el ser mas bello que hasta el momento había visto, esta monita lleno de alegría nuestra casa, nuestras vidas.
¡Te amo mas que nunca pollito!
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